Gobernador de Idaho declara ilegal ayudar a una menor a abortar sin el consentimiento de los padres


El gobernador de Idaho, Brad Little, firmó la semana pasada una ley que declara ilegal ayudar a una menor a abortar suministrándole fármacos o ayudándola a cruzar las fronteras estatales para interrumpir un embarazo sin el consentimiento de los padres.
La Ley 232 de la Cámara de Representantes, la primera de este tipo, crea un nuevo delito denominado “tráfico de abortos” y prohíbe a los adultos conseguir fármacos abortivos para una menor o “reclutar, albergar o transportar a la menor embarazada” a través de las fronteras estatales para que aborte sin el consentimiento de uno de sus padres o tutores, según Associated Press.
Little, republicano, firmó la ley el pasado miércoles. El aborto está prohibido en el estado.
Quienes sean declarados culpables de violar la nueva ley se enfrentan a una posible pena de cárcel de dos a cinco años y se exponen a ser demandados por los padres o tutores de la niña implicada.
La ley también faculta al fiscal general de Idaho para presentar cargos contra las personas acusadas de violar la ley, incluso si el fiscal del condado decide no presentar cargos penales.
Para garantizar el cumplimiento del derecho constitucional a viajar entre estados, la ley de Idaho se centra específicamente sólo en la parte del viaje que tiene lugar dentro del estado cuando se solicitan servicios de aborto a un proveedor de otro estado.
“El proyecto de ley 242 de la Cámara de Representantes no penaliza, impide ni perjudica de otro modo los viajes interestatales, ni limita el derecho de una mujer adulta a abortar en otro estado”, dijo Little en su declaración de firma.
“Más bien, la disposición sobre el ‘tráfico de abortos’ del proyecto de ley sólo pretende impedir que las menores no emancipadas sean llevadas a otro estado para abortar sin el conocimiento y el consentimiento de sus padres o tutores”, añadió el gobernador.
El proyecto de ley fue condenado por el director estatal de Idaho de Planned Parenthood Alliance Advocates-West.
“Una vez más, el gobernador de Idaho desoyó a los electores y firmó la ley HB 242, creando el primer delito del país del llamado ‘tráfico de abortos’. Esta legislación es despreciable, y vamos a hacer todo lo que esté en nuestra mano para detenerla”, tuiteó la organización.
Idaho es uno de los 13 estados de EE.UU. que han restringido el aborto en todas las fases del embarazo desde la decisión del Tribunal Supremo que anuló el caso Roe contra Wade el pasado mes de junio.
Treinta y seis estados exigen la participación de los padres en la decisión de una menor de abortar, según el Instituto Guttmacher. Estados como Washington, Oregón y California, por el contrario, se han presentado como paraísos seguros para abortar.
Idaho también ha aprobado recientemente una ley que tipifica como delito grave el suministro de hormonas sexuales cruzadas y bloqueadores de la pubertad a menores.

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