Intervención divina salva del suicidio a ex participante de Nuestra Belleza Latina

Y de camino Dios pone en mi corazón: ¡DETENTE! ¡PARA!… Y me detengo porque fue algo más fuerte que yo, y muy convincente. Pero en medio del dolor y el miedo, comienzo a pelear: “¿Por qué? ¿Detenerme, para qué…” – Stephanie Gómez

La ex participante del concurso de “Nuestra Belleza Latina”, que transmite la televisora Univisión, ha recibido una gran convicción. Y es que Stephanie Gómez tomó la decisión más importante de su vida, entregar su corazón a Jesucristo. Luego de enfrentar el momento más oscuro de su vida donde se encontraba sin esperanza deseando quitarse la vida.

Gómez, quien participó en varios certámenes de bellezas y fue bailarina profesional de la música urbana, trató de llenar la soledad que sentía con el dinero, fama y atenciones. “Me parece a veces un poco confuso y me pregunto siempre: ¿cómo es que nuestras decisiones nos llevan a equivocarnos y son las más que nos causan dolor? ¿no se supone que al tu tener la libertad de escoger, y tomar tus decisiones sepas lo que estás haciendo o cómo decimos nosotros acá, sepas “la que hay”. Pues literalmente yo pensaba que todas las decisiones que estaba tomando en mi vida eran las mejores para mí, porque me parecían la solución al momento. Porque parecía que llenaría todos los vacíos que había en mí”, comparte Stephanie.

“Pero todas las decisiones que yo estaba tomando terminaban siendo lo peor que me podía pasar. Pude haber logrado muchas cosas, tener una corona, una cinta que define si eres Miss, si tienes el mejor cuerpo o la mejor sonrisa, los artistas, los viajes, los hombres, el dinero, nada de eso pudo llenar el vacío inmenso que había en mí; más llegué a perder tantas cosas como: mi valor como mujer, mi dignidad, yo era de las que me entregaba por completo a cualquiera que me ofreciera solo un poco del amor que yo anhelaba” añadió Stephanie al momento de recordar todo lo que llegó a vivir.

El suicidio

La ex participante de belleza nos comparte que, al pasar por tanta oscuridad en su vida por cada decisión que tomo para llenar los vacíos que tenía, llegó el momento donde su corazón, emociones y autoestima se fueron al piso.

“Me sentía tan sola, tan sucia, tan fea, peor que la tierra, porque si la tierra ya está en el piso y todos la pisan, yo me sentía menos que eso. Así que esa noche… luego de un aborto, luego de maltratos, luego de una violación, luego de haber estado tomando alcohol y luego de haber estado con un hombre… ya llevando dos meses que vivía en mi carro comiendo “corn flakes” … Yo comienzo a pensar lo cansada, agotada, destruida y llena de dolor. Sentía que no había nada más que yo pudiera hacer. Y es cuando decido que me voy a quitar la vida. Mi decisión estaba tomada, comienzo a acelerar el auto y lo acelero lo más que puedo rumbo a un barranco, al vacío. Y de camino Dios pone en mi corazón: ¡DETENTE! ¡PARA!… Y me detengo porque fue algo más fuerte que yo, y muy convincente. Pero en medio del dolor y el miedo, comienzo a pelear: “¿Por qué? ¿Detenerme, para qué? Si ya no hay más nada que hacer, ya hice todo lo que podía, todas mis opciones se agotaron, parece que nací para sufrir, para pasar malos ratos, para llorar, para todo lo malo”. Yo gritaba. Y Él me contesta: “¡Todavía tienes una opción!”. A lo que me enojo más y con rabia grito: ¡YA LO HE INTENTADO TODO! Y fue como si él contestara: ¡AUN NO ME HAS INTENTADO A MI! Entre la rabia me quedo callada y digo: “Está bien, pero si algo no pasa hoy, me continuo con mi plan y me quito la vida.”

El cambio

Es en ese mismo momento donde Stephanie experimentó la sobrenaturalidad de Dios. Le dio la oportunidad para que hiciera lo que ella nunca logro poder hacer.

“Todo esto sucedió un domingo a las 5:30 de la tarde. A las 6:00pm comenzaba un servicio de una iglesia a la que fui sólo una vez. Pero cuando llego allí, no sé ni de que se trató el servicio, no sé qué estaba pasando en aquel lugar. Yo sólo sé que estuve en la parte de atrás en una esquina, arrodillada y con un llanto que no podía parar porque por primera vez estaba teniendo una relación con alguien que no le interesaba lo que yo le pudiese ofrecer, sino que mi corazón. Por primera vez sentí un abrazo de amor, y por primera vez comencé a sentir lo que por años estaba buscando y con tantas fuerzas no encontré. Es entonces que por primera vez tomé la mejor decisión que haya podido haber tomado en mi vida y que no me he arrepentido, y que he decidido que no vuelvo atrás.”

Después de esa gran noche, Gómez comenzó a tomar decisiones radicales, pero esta vez sin tener el miedo de sentirse rechazada y sola porque ya sabía quién estaba con ella. Decidió entregar su vida por completo y comenzó desde cero. “Deje todo lo que tenía y es cuando me regreso a Puerto Rico para reanudar lazos con mi familia. Y en este proceso de transformación, Dios comenzó a bendecirme y mostrarme su sobrenaturalidad. Me ha rodeado de gente que me ama de verdad, de verdaderos amigos, de gente que me ayudan a crecer, no a estancarme, me ha regalado el saber el valor de las cosas. Ahora me disfruto tanto el tan sólo hablar con personas y escucharlas y ahora poder ayudarlas. Valoro tanto también el tan sólo estar en el sofá de mi casa mirando a mi abuela cocinar. Ahora esas son las cosas que me hacen feliz y lo más importante, algo que nunca pensé que tendría, una relación amorosa seria, viviendo en abstinencia hasta que nos casemos, y que aún así le puedo ser fiel.”

De lo imposible a lo posible

Esta hermosa historia de lo que hace el poder transformador de Dios igualmente lo puede hacer contigo. La esencia y naturalidad del Dios todopoderoso logra lo imposible a posible. Como todo ser humano, podemos pasar muchos sucesos en nuestra vida, pero tomar la decisión de rendirnos y confiar en Dios nos da la garantía que experimentar la victoria. Sin Dios la vida no tiene sentido, sin sentido la vida no tiene propósito, y sin propósito el hombre no ve la gloria de Dios. Los hijos de Dios no viven para sobrevivir, sino para sobreabundar.

“Aquí todos tenemos historias y yo no sé cuál hoy sea tu historia, cual hoy sea tu frustración, cual hoy sea tu dolor… yo lo que sé que es que él te ama tanto y si estas leyendo esto es porque Él te quiere decir que aun tienes una opción, aun lo puedes intentar a él, aun te queda una decisión por tomar. ¿Quién ama así? No importa como estés, como hables o como te vistas. Él ya te ama así.”

Filipenses 3: 12-13
12 No quiero decir que ya haya logrado estas cosas ni que ya haya alcanzado la perfección; pero sigo adelante a fin de hacer mía esa perfección para la cual Cristo Jesús primeramente me hizo suyo. 13 No, amados hermanos, no lo he logrado, pero me concentro únicamente en esto: olvido el pasado y fijo la mirada en lo que tengo por delante…”