LA ADORACIÓN: EL IDIOMA DE LA FE

Precisamente durante esta semana estuve compartiendo con amigos de distintas naciones y algo que sucedió fue que ninguno necesitamos intérprete, pues todos logramos la comunicación a través de nuestras expresiones físicas. Con las manos y con el rostro, sin hablar reflejábamos lo que queríamos.

Asimismo comparo la fe, es como el lenguaje de la adoración, que hace que levantemos las manos y alcemos la voz hasta que nuestro mensaje llegue directo a la ciudad celestial, sin necesidad de interpretación. La adoración es el idioma de la fe, pues te mueve a comunicarte con Dios con la convicción de que serás entendido.

El idioma de la fe, es eso que todos pueden hablar, a través de una adoración genuina, que sale del corazón creyendo y confiando en el cumplimiento de cada promesa departe de Dios, y de esta manera, obtener una respuesta.

La fe es la certeza de lo que se espera, la conviccion de lo que no se ve. Así que cuando tú comienzas a adorar, se activa el idioma de la fe. Se trata de creer, de alabar, de entonar cánticos y declarar victoria, se trata de comunicarte con el corazón y hablar con tus gestos mediante una entrega que nace desde lo más profundo de tu ser. Ese es el idioma de la fe.

Permite que tu ser entero se llene del idioma de la fe, afina tus oídos y comienza a recibir el mejor de los regalos, la mejor adoración, la más pura intención de una comunicación que llega directo al cielo, el idioma que todos podemos hablar, el idioma de la fe.

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