Terapias de conversión vs consejería bíblica


La opinión sin conocimiento es solo opinión
En nuestro Puerto Rico al igual que en muchas partes del mundo las personas tienen la tendencia de opinar de todo tipo de tema sin realmente conocer del tema. En otras palabras, opinan de todo pero en que basan su opinión; me dijeron, escuche que, leí este artículo entre otras referencias que son mera opinión. Es como el escrito en respuesta de los puertorriqueños que algunos adjudican a Gabriel Garcia Márquez y otros al profesor cubano Luis Aguilar León (escoja usted):
“Los puertorriqueños nacen con sabiduría. No necesitan leer, ¡todo lo saben! No necesitan viajar, ¡todo lo han visto! Los puertorriqueños son algo así como el pueblo escogido, por ellos mismos.”
“Los puertorriqueños ofrecen soluciones antes de saber el problema. Para ellos nunca hay problema. Saben lo que hay que hacer para erradicar el terrorismo, encausar a América Latina, eliminar el hambre en África, pagar la deuda externa, quién debe ser presidente y cómo Estados Unidos puede llegar a ser una potencia mundial.”
No me mal entienda, yo me considero puertorriqueño como la mancha del plátano, pero a veces leo y escucho razonamientos que son solo opiniones que hacen mucho daño a nuestra sociedad. Tal es el caso de las terapias de conversión, terapias reparativas o de restitución (otros términos). Antes que nada y sin entrar en controversias sobre el proyecto 1000 (el cual personalmente leí); estos son algunos de los comentarios que hemos escuchado: las terapias de conversión no se practican en Puerto Rico, otros dicen que es a los Padres y no al gobierno quien decide si su hijo deba recibir terapia por un deseo o conducta homosexual, otros que si se practica y así sucesivamente hemos podido leer los razonamientos de muchos y la opinión de otros.
No obstante, ya se ha hablado mucho del tema y mi intención aquí es aclarar la diferencia entre una Terapia de Conversión y Consejería Biblica. La terapia de reorientación sexual (también conocida como terapia de conversión sexual, reparativa o de deshomosexualización) consiste en una serie de métodos no aceptados actualmente por las ciencias de la salud mental enfocados al cambio de la orientación sexual de personas homosexuales y bisexuales para intentar convertirlos en heterosexuales, o para eliminar o disminuir sus deseos y comportamientos homosexuales, incluyendo la modificación del comportamiento, la terapia de aversión, el psicoanálisis, la oración y el consejo religioso. Nuestros senadores han utilizado esta definición como estrategia para decir lo que es una terapia de conversión porque así aparece claramente definida en el proyecto 1000 (querido lector si desea buscar esta definición la puede conseguir en Wikipedia). Es interesante que nuestro Senado use una definición como esta para redactar un proyecto confuso ya que la oración y la consejería religiosa no es lo mismo que una terapia de conversión.
¿Qué es una terapia de conversión?
Pero vamos a repasar la historia y que es realmente una terapia de conversión. Carl Vaernet medico alemán en la época nazi utilizaba terapias de conversión donde empleó inyecciones de hormonas, la castración y otras técnicas para tratar de «curar» a los homosexuales en el campo de concentración de Buchenwald tras la Guerra, Vaernet fue apresado por las autoridades británicas y entregado al gobierno danés para ser juzgado por crímenes de guerra, pero consiguió escapar y continuó su actividad en Argentina.
En los Estados Unidos hubo un auge de estas prácticas en los años 1939 al 1969 como una forma de convertir a homosexuales a heterosexuales de formas no éticas al igual que en otras partes del mundo. Como parte de la modificación de conducta más radicales se encontraba la terapia de electroshock, el reacondicionamiento de la masturbación, visualización, lobotomía, tratamientos aversivos, entre otros. Los medios utilizados por muchos de estos teóricos eran antiéticos. Podríamos ofrecer más ejemplos, pero en síntesis este breve resumen nos da una idea del problema. Estas terapias fueron practicadas por gobiernos y profesionales de la conducta humana no por la iglesia. Si existieron casos en siglos pasados donde la iglesia practico formas no bíblicas para trabajar con el tema de la homosexualidad, pero aun así no se consideraba una Terapia de conversión.
En el 1992 se fundó la Asociación Nacional para la Investigación y la Terapia de la Homosexualidad (Instituto NARTH-por sus siglas en inglés) por Benjamín Kaufman, Charles Socarides y Joseph Nicolosi. Para muchos este organismo utilizaba la terapia de conversión, aunque para otros era solo terapia reparativa (para algunos es lo mismo para otros no).
En medio de las controversias observadas a través de la historia y las actuales sobre la determinación de los padres decidir qué es lo mejor para sus hijos; la terapia de conversión, de restitución, reparativa, reconstructiva (algunos de sus otros nombres) no es y repito no es lo mismo que consejería bíblica, religiosa o cristiana.
¿Qué es una consejería bíblica?
Definamos la consejería bíblica, es un ministerio de la Palabra por el cual los cristianos ayudan a otros a entender y cambiar la manera en que sus corazones están activamente respondiendo a Dios en medio de sus circunstancias. Es el ministerio personal de la Palabra que busca ayudar a las personas a poner a Dios en el centro de sus vidas y relaciones. Esta consejería impacta profundamente nuestras vidas porque nos ayuda a comprender las dinámicas de nuestros corazones. Esto con el fin de que alcancemos el propósito de Dios para nosotros, que es llegar a ser cómo Jesús (Dr. Jeremy Pierre SBTS). En otras palabras, la consejería bíblica o cristiana es una intervención como proceso transformativo en la vida del ser humano basado en la palabra de Dios como fundamento de fe. La iglesia como novia o agente representativo está obligada a ofrecer el consejo de Dios para el hombre y la mujer basado en la verdad revelada en la Biblia. Esta es nuestra misión y obligación. Existe ya una separación entre iglesia y el estado donde el estado no puede bajo ley intervenir en los asuntos de la iglesia. También no le compete al estado decidir como el padre debe intervenir en la vida de su hijo siempre y cuando no exista una conducta de maltrato.
Sin evidencia o estadística
Sobre la práctica de la terapia de conversión en profesionales que prestan servicios a pacientes en Puerto Rico, no existe hasta el momento ninguna evidencia o estadística. No obstante, de existir algún tipo de practica antiética ya existen los mecanismos de ley para radicar querellas. En el caso de psicólogos y psicólogas seria a la Junta Examinadora de Psicólogos que ya tiene un gobierno autónomo como procedimiento de ley si se viola el código de ética.
Por último, querido lector espero poder esclarecer en una forma sencilla la diferencia sobre la terapia de conversión y la consejería bíblica basado en conocimiento y no en opiniones.
Escrito por: Psicólogo Michael Córdova
